Por. Darnelly Vera García.
Todos queríamos ganar. María Isabel Cruz nos dijo “nada de chancletas, hay que irse bien presentados”. Así el 28 de noviembre nos reunimos a las 6:00 p.m. en la sede de la fundación, nerviosos, felices de ser finalistas y por supuesto bien presentados como lo dijo María Isabel.
Hace unos meses iniciamos con esta tarea, después de conocer a la Sra. Daniela Konietzko y a Julieta Arboleda de la Fundación Alvaralice. Ellas nos hablaron del Premio Cívico “Por Una ciudad Mejor” y nos invitaron al Tecnocentro “Somos Pacífico”, allí nos recibió Andrés Ramírez y nos contó sobre el trabajo que esta fundación, en alianza con otras instituciones y empresas, adelanta con la comunidad de Potrero Grande y el Distrito de Aguablanca.
Postulamos la iniciativa “Colegio y Talleres de las Aguas Montebello” e iniciamos todas las fases del proceso de selección. Diana Victoria y yo fuimos la encargadas de diligenciar los formularios, estar en contacto con Felipe Pito, a quien llamamos incansablemente cada vez que teníamos una dificultad, atender la visita de Iván Rojas para responder los 5 puntos de la evaluación y finalmente recibir al jurado para hacer el recorrido por la iniciativa.
La expectativa creció y creció cada día, el 28 de octubre nos dimos cuenta que estábamos entre los 10 finalistas del premio y que el jurado nos visitaría, el 29 de octubre lo recibimos, con los estudiantes de los talleres y los niños que estaban en sus jornadas de lúdicas, pero tuvimos que esperar un mes para la ceremonia de premiación.
Durante estas semanas, todos los miércoles en la reunión Magdaly leía este punto en el acta, y entre más cerca estaba la fecha más risas nerviosas se veían entre los integrantes de la mesa. El último miércoles sacamos el listado de las 20 personas que íbamos a asistir, a la ceremonia.
A las 6:30 p.m. estábamos todos, los 20, en el auditorio del Centro Cultural Comfandi, nos encontramos con los otros finalistas, tomamos fotos, hacíamos chistes, ayudábamos a Lisa Marín, estudiante de Mercadeo y Ventas, con las palabras que diría si ganábamos el premio.
El Presentador del evento empezó a mencionar las instituciones y nos llamó en el momento de entregar la Mención Especial, aunque no era el premio de Primer Puesto aplaudimos como si lo fuera, Andrés Bäppler se levantó, con su traje elegante y el botón del Club Rotario puesto, y se dirigió hacia el escenario para recibir la placa, todos le apoyamos desde la silla.
Al finalizar la ceremonia, felicitamos en conjunto a la Biblioteca La Guaca, el ganador del primer premio, Ignacio Ojeda es amigo de la fundación y nos acompañamos en el desarrollo de las actividades a través del programa Weltwärts. Diana Cristina es la voluntaria que esta con ellos este año.
Para nosotros fue una gran experiencia participar en este premio, conocer a otras iniciativas comunitarias que trabajan por el bienestar de las comunidades, fortalecer nuestro trabajo en red y sobre todo darnos cuenta de que estamos haciendo las cosas bien, que podemos sacar nuestros proyectos adelante y que con el beneficio educativo que brindamos a los niños y jóvenes de Montebello aportamos a construir una ciudad mejor.
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